Para empezar este post -retomando la escritura luego de casi 1 año y antes de que termine el 2021-, les contaré acerca del mito de "La Media Naranja", uno de los mitos griego que hablan del amor: "Antiguamente el ser humano tenía 2 cabezas, 4 brazos, 4 piernas y 2 corazones; es decir, cada uno estaba pegado a su alma gemela o media naranja, por lo que la humanidad era felices, nos complementábamos. Sin embargo, los dioses, celosos de ver al ser humano completo, decidieron dividirnos y separarnos por el mundo; desde entonces, nos pasamos toda nuestra vida buscando esa parte que nos falta".
Por ello, es que la búsqueda del amor se ha vuelto la más difícil odisea para muchos, y en especial en nuestros tiempos, donde estamos tan conectados y, a su vez, poco comunicados. Sí, sí... iremos por partes, ¿qué es el amor? Si analizamos etimológicamente hablando, la palabra amor proviene de la palabra latina “amor” que significa afecto o inclinación, es un concepto que ha ido evolucionando adquiriendo diferentes significados según el contexto desde el que se estuviera analizando y dependiendo de la cultura imperante en cada momento histórico.
Es así que la idea del amor romántico surge recién a partir del siglo XVIII, y recién en el siglo XX esta definición cambió a lo que ahora conocemos cómo el amor y la gran búsqueda de nuestra media naranja... o tal vez, no encontrarla. A veces me pongo a pensar en cómo esta búsqueda ha ido cambiando, escucho las historias de amor de mi bisabuelos, de mis abuelos, de mis papás y de mis amigos y conocidos... y cada uno tiene una experiencia única.
Inclusive el amor a través de las edades es diferente... recordar el amor de adolescente a veces me hace reír, así como analizar mis intentos fallidos ahora de adulto... escuchar cómo el poliamor es la nueva tendencia en el mundo o cómo cada vez hay más relaciones abiertas, y yo sólo pienso: "nací en la época equivocada" o "no consigo ni 1 match... menos voy a conseguir estar en un poliamor...". Pero esa es la situación, el concepto de amor está cambiando, ya no existen las mismas reglas que antes, y sabemos que cada pareja forma las suyas... y aquí es dónde surge mi principal pregunta...
¿Qué tan difícil es encontrar nuestra media naranja?
Para tener mi primera relación seria, pasé por casi 18 años... mi única relación seria hasta el momento, porque la de secundaria fue en 5to y terminó tan rápido como empezó... luego de terminar, casi 8 años después, sigo buscando una segunda oportunidad en el amor. No es que no esté interesado, sino que cada vez mi lista de lo que busco y de lo que no quiero es más larga, y lograr que las personas cuajen o al menos tengan alguna de esas características, se torna difícil.
¿No les sucede que bajan las aplicaciones para buscar citas, hacen match, conversan unas horas, imaginas que hacen buena química, pero luego esa conversación se queda en nada? Pues sí, ese es uno de los problemas, ahora tenemos miles formas de comunicarnos: redes sociales, mensajería inmediata, mensajes internos, mensajes multimedia, videollamadas... y la lista sigue, pero comunicarse como debe ser, mantener el interés, gilear... cada vez es más difícil, o queremos hacerlo difícil.
El interés que mostramos en un primer momento, vemos como día a día va cayendo en el DM hasta que ya no lo visualizas y te das cuenta que todo quedó ahí, luego desinstalas la app, vuelves a empezar otra vez y todo vuelve a ocurrir. Es decir, nos frustramos porque lo que creíste que podía darse, al final quedó en nada... ¿por qué? porque a pesar de tener miles de herramientas para comunicarnos, no nos estamos comunicando... seamos sinceros, estamos en una vitrina, todos expuestos a ver si haremos un match real con alguien, pero al tener un mercado de opciones, siempre estamos compitiendo entre todos para llamar la atención, así que si el mejor o la mejor postor hace match con nosotros, dejamos al anterior para ir al siguiente, mientras esa persona hace totalmente lo mismo.
Así que llega un momento en que empiezas a limpiar tu whatsapp o tu Instagram, y vas eliminando a esas personas con las cuales sólo escribiste: "hola, soy de tal (nombre de la aplicación)" y quedó ahí... ¿por qué todo tiene que ser tan difícil? Porque la complejidad y facilidad con la que nos comunicamos actualmente, da pie a que creemos nuevas estrategias para llamar la atención, mejores contenidos, mejores fotos, mejores post... o vendemos una vida fit, o una vida de viajes, vendemos moda o algún emprendimiento... y así, atraemos a personas que también están interesadas en lo mismo, y dejamos que la esencia quede en segundo plano... porque lo que importa es la imagen.
Estoy por entrar a los 40s, no sé qué tan difícil va ser encontrar a mi nueva media naranja o tal vez me quede como el tío soltero que sólo dará consejos... pero, como todos, seguimos en la búsqueda de nuestra alma gemela porque todos sentimos que al final, toda esa montaña rusa de emociones vale la pena. Y a ti, que sientes que encontraste a tu complemento, te deseo que lo vivas a pleno, más vale vivir y luego sufrir que nunca haberlo experimentado.
Ya llega el 2022, así que tendré 365 nuevas oportunidades para ver cuántas veces bajaré algún app y cuántas veces la desinstalaré... el juego vuelve a comenzar.